La Ostra Risada del Delta del Ebro, con nombre científico Crassostrea Gigas, es una de las ostras más apreciadas por su calidad, sabor único y textura firme. Criada en las aguas especiales del Delta del Ebro, esta ostra se beneficia de un ecosistema excepcional que combina aguas dulces y saladas, proporcionándole unas propiedades inigualables. En esta página encontrarás toda la información sobre la ostra rizada: desde sus orígenes hasta los datos científicos, estadísticas de producción y las zonas de cultivo más importantes.
La cría de ostras en el Delta del Ebro comienza a ganar protagonismo durante la segunda mitad del siglo XX, coincidiendo con el aumento del consumo de marisco de calidad en el Mediterráneo. Las aguas ricas en nutrientes del Delta y la creciente demanda de ostras en el mercado español y europeo llevaron a la introducción de la Ostra Rizada (Crassostrea gigas), una especie originaria de Japón que encontró en el Delta del Ebro un hábitat ideal .
Desde entonces, la Ostra Rizada del Delta se ha convertido en un producto de referencia, conocido por su sostenibilidad y su producción basada en técnicas tradicionales que respetan el equilibrio ecológico de la zona.
La campaña de la Ostra Risada del Delta dura todo el año, ya que actualmente existe una variedad llamada Ostra Triploide que está durante todo el año, aunque desde finales de octubre hasta abril, es el momento en el que las ostras se encuentran en su mejor calidad para el consumo. Esta temporada coincide con los meses de frío, cuando las ostras rizadas tienen un sabor más intenso y una textura más firme debido al descenso de la temperatura del agua.
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¿Sabías que… Sólo en el Delta del Ebro, la producción global de la ostra es de 800 toneladas anuales?
La Ostra Rizada del Delta se diferencia por sus propiedades físicas y sensoriales, resultado de las condiciones únicas del entorno y su método de cultivo sostenible. Estas características hacen que sea una de las ostras más apreciadas por los gourmets y consumidores en todo el Mediterráneo.
El caparazón es rizado e irregular, con surcos profundos y bordes ondulados. Esta característica física la diferencia de las ostras de otras regiones, que suelen tener caparazones más uniformes o lisas.
La carne de la ostra del Delta es firme y carnosa, con una sensación crujiente en boca. Esta firmeza se debe a las condiciones de las aguas del Delta, que permiten que la ostra desarrolle una carne más compacta.
Su sabor es intenso pero equilibrado, con una combinación perfecta de salinidad y dulzura. Este equilibrio se debe a la mezcla de aguas dulces y saladas, mientras que las ostras de otras regiones, especialmente las criadas en aguas completamente saladas, tienden a tener un sabor más fuerte y salado
El Delta del Ebro proporciona las condiciones ideales para el cultivo de la ostra rizada, con dos zonas principales de producción: la Bahía de los Alfaques y la Bahía del Fangar. Cada una de estas zonas ofrece características únicas que permiten obtener ostras de alta calidad.
Con una extensión de 50 km², ésta es la bahía más grande del Delta, ofreciendo aguas tranquilas y una alta concentración de fitoplancton, que es el alimento principal de las ostras.
La mezcla de agua dulce del río Ebro y el agua salada del mar Mediterráneo crea un entorno equilibrado en nutrientes, haciendo que las ostras rizadas crezcan con mayor sabor y consistencia.
Situada en el norte del Delta, esta bahía tiene unos 30 km² de superficie, con aguas tranquilas y ricas en minerales, proporcionando un hábitat perfecto para la cría de las ostras rizadas.
Esta bahía produce aproximadamente el 80% de las ostras del Delta y es conocida por ofrecer un producto de gran calidad, con un sabor más intenso debido a la concentración de nutrientes en el agua.
El proceso de cultivo de la Ostra Rizada del Delta es completamente natural y sostenible, siguiendo técnicas tradicionales que respetan el ecosistema del Delta. La producción comienza con la captación de semillas de ostras, que después se fijan en las estructuras instaladas en las bahías hasta que alcanzan el tamaño comercial adecuado.
Las semillas de ostra se capturan de forma natural durante la época de reproducción. Estas larvas se fijan en cuerdas y estructuras que se sumergen en las aguas de las bahías.
Las ostras rizadas se dejan crecer durante 18 a 24 meses, alimentándose del fitoplancton natural que prolifera en estas aguas ricas en nutrientes.
Una vez que alcanzan el tamaño adecuado (entre 7 y 10 cm), las ostras son recolectadas y pasan por un proceso de depuración en aguas filtradas para garantizar que sean completamente seguras para el consumo humano.